miércoles, 8 de abril de 2015

¡Adiós y bienvenidos!

Cuchuflín va creciendo y su pie... ¡TAMBIÉN! El otro día cuchuflín se ponía el zapato en la planta del pie y me decía "mamá no", y es que la talla 21 ya le va quedando justilla y toca decirle adiós, por el bien de esos deditos que cada día van más apretaditos. Así es que damos la bienvenida a los nuevos zapatos de la talla 22.



Como en todo lo que hacemos en esta casa, cuchuflín ha participado del momento, más que eso, ha sido el protagonista (que para algo son sus zapatos...): ha limpiado los zapatos, los ha emparejado y los ha metido en sus cajas. Esto es lo que se llama "VIDA PRÁCTICA", área a la que da mucha importancia el método Montessori y por lo que me gusta tanto, ya que es al fin y al cabo lo que más hacemos cuchuflin y yo en nuestro día a día, divertirnos y aprender con las tareas de la vida diaria. Haciéndole partícipe, cuchuflín se vuelve cada vez más independiente, y a su vez va aprendiendo y trabajando de manera significativa para él (mucho mejor que estar haciendo fichas y fichas, o poniendo gomets en una hoja porque lo manda la seño, sin tener ningun sentido esta actividad para el niño... ¿no os parece?).





Con una tarea tan sencilla como limpiar unos zapatos, cuchuflín aprende cantidad de cosas: conoce su cuerpo, se hace consciente de que crece, trabaja la coordinación mano-ojo y la motricidad fina al limpiar los zapatos con la toallita, trabaja la  atención y asociación visual al emparejarlos, se hace responsable del cuidado de sus cosas... ¿entienden porque creo que un niño no necesita ir a la guardería para aprender? Y es que no hay nada como aprender sin prisas ni presiones, disfrutando de las cosas que van surgiendo en el día a día.

He querido compartir con vosotros este momento y creo que es una buena ocasión para empezar la sección: COSAS DEL PEQUE, que como bien indica el nombre, tratará de cosas varias utilizadas por cuchuflín: zapatos, trona, bañera, juguetes, carro, ropa, etc.

Por lo que respecta a los zapatos, mi consejo es que tengáis paciencia, no seáis unas locas de la vida como fui yo en su día, que sin siquiera saber si era chico o chica, me pudo la emoción de madre primeriza, y me puse a comprarle cantidad de zapatos de marcas y tallas diversas (menos mal que los cogí todos de chico y acerté el sexo  XD). Debo reconocer que los cogí en una tienda que estaban de liquidación por cierre y me salieron tirados de precio, y me han hecho su papel, pero aún así siempre es mejor probarlos en el pie del niño, porque cada pie es diferente, y lo que a un niño le puede ir bien, a otro puede molestarle.

Lo que está claro es que si vemos una ganga... ¡no la vamos a dejar pasar! y más con lo caros que están los zapatos de niños... Pero si los compráis antes de tiempo, si que os daría unos consejos después de mi experiencia de comprarle cantidad de zapatos de todas las tallas, cuando estaba embarazada de pocas semanas.

- No cojáis  zapatos de las primeras tallas que se os quedarán nuevos y lo mejor para el pie del niño es estar libre, sin nada que le oprima y apriete. Si es verano, nada como ir descalzos, y si es invierno, unos calcetines bien gruesos.

- A la hora de elegir entre unos y otros no os dejéis guiar por el que es más bonito, sino pensar cuál será más cómodo para vuestro retoño (ahí falle yo, que en ese momento lo único que pensaba era que fueran "cucos").

- Informaros bien sobre qué es lo mejor para el pie del niño, que ha cambiado mucho lo que se decía en época de nuestros padres (suela rígida, que cogieran el tobillo...) y lo que se aconseja ahora (descalzo mejor que calzado, suela lo más flexible posible, tobillo en libertad...)

- Tener en cuenta que en el primer año de vida el niño suele utilizar de la talla 15 a la 20...así que cada dos-tres meses va a cambiar de talla. Tenerlo en cuenta a la hora de calcular si le va a pillar en verano o en invierno para cogerle sandalias o botas.

- Los pies son fuente de información para el niño, más incluso que las manos hasta los 8-9 meses. Por tanto, lo mejor es llevarlos descalzos siempre que podamos y calzarlos únicamente cuando sea imprescindible (no vas a llevarlos al parque descalzos ya que hay peligro de que se claven cosas...). Cuchuflín fue descalzo hasta los 9 meses que empezó a gatear y ponerse de pie cogido de las cosas, ahí ya empecé a usar zapatos de suela blanda antideslizante para ir por la calle y lo seguía llevando descalzo por casa y por lugares seguros (cesped, playa...).

- Os aconsejo que compréis zapatos a partir de la talla 19 (suelen utilizarla hacía los 9 meses, que es cuando suelen empezar a  gatear y a levantarse) y que sean de suela blanda con antideslizante.

- Más vale que tengan un único zapato de cada talla  pero que sea buenoflexible, cómodo y nuevo (si los heredan ya han cogido la forma del pie anterior y no es recomendable ya que cada uno tiene un andar y pisada diferente). Total, pensar que es poco el tiempo que van a utilizar cada talla así que tampoco necesitan más.

Hay diversos estudios que muestran el papel vital de los pies en el desarrollo de la inteligencia del bebé, ya que durante los primeros años en ellos hay receptores privilegiados que les dan información del mundo que les rodea. ¡¡DEJAD QUE EXPLOREN sin ponerles los zapatos que les crean limitaciones!! Además yendo descalzos trabajan más la musculatura de los pies y sus pies se desarrollan y crecen en libertad.

¿Por qué tanto interés en cubrirles los pies?  Si os fijáis nos venden zapatos de pre-andante, de pre-gateo, de gateo... cuando los estudios demuestran que calzar a los bebés cuando aún no saben caminar puede perjudicar su desarrollo. 

Así que aunque los zapatitos de bebés son muy bonitos, la verdad es que son poco útiles y lo mejor es que no los utilicen hasta que empiecen a andar (y mira...un dinerillo que nos ahorramos). Me quedo con esta frase:


"Si quieres un bebé inteligente y feliz, déjalo descalzo"

Dejo pendiente para otro post las diferentes marcas de zapatos. Que tras mucho investigar he encontrado unas cuantas que son de suela bastante flexible, con velcro para dar autonomía al niño y anchos para que no le aprieten los dedos. También os diré cuales se me han quedado como nuevos porque los compré como ya os dije mirando que fueran "cucos" (¡que no os pase a vosotr@s!).

¿Lleváis descalzos a vuestros hijos o os gusta llevarlos rebonicos y conjuntaditos desde bien pequeños?




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