El otro día nos pusimos manos a la obra con la limpieza de la terraza, que con el buen tiempo que tenemos, ¡ya apetece salir a comer o cenar ahí! No se quien limpió más, si cuchuflin o yo...
Para ellos todas estas actividades y tareas son un magnífico y divertido juego, y además es una actividad estupenda de VIDA PRÁCTICA, en la que:
- Se hacen responsables de las cosas de su entorno.
- Aprenden que hay que cuidarlas, limpiarlas, que estén ordenadas...
- Trabajan la concentración.
- Aprenden a seguir pasos.
- Trabajan la coordinación mano-ojo y la motricidad fina...
¿Qué más le podemos pedir a la simple tarea de limpiar una silla o unos barrotes?
- Se hacen responsables de las cosas de su entorno.
- Aprenden que hay que cuidarlas, limpiarlas, que estén ordenadas...
- Trabajan la concentración.
- Aprenden a seguir pasos.
- Trabajan la coordinación mano-ojo y la motricidad fina...
¿Qué más le podemos pedir a la simple tarea de limpiar una silla o unos barrotes?
Y a vosotros, ¿os gusta que vuestros hijos os ayuden en las tareas de casa?
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